¿ Porque tu vida es tan aburrida?
¿No les pasa que al despertar, lo primero que hacen es tomar el teléfono y revisar las redes sociales? Ven a todas esas personas en playas paradisíacas, viajando por el mundo, hospedándose en hoteles lujosos o practicando deportes extremos.
Después de pasar casi 30 minutos en esa actividad, deciden levantarse, toman el mismo desayuno de siempre y comienzan otro día más. Si tu vida carece de emoción, es importante preguntarnos qué podemos hacer para cambiar eso.
Aquí radica el problema: no podemos esperar que nuestro día sea emocionante si no cambiamos nada o no nos arriesgamos. Como dijo Albert Einstein, no podemos hacer siempre lo mismo y esperar resultados diferentes. Somos nosotros quienes debemos generar los cambios y buscar las oportunidades. Debemos aprovechar nuestros tiempos libres para explorar nuevas formas de acercarnos a las cosas que deseamos hacer.
Un concepto que cambió mi perspectiva fue el de la «zona de confort». Nuestros hábitos, rutinas, habilidades, conocimientos, actitudes y comportamientos forman parte de nuestra zona de confort. Aunque nos guste estar cómodos y seguros, también anhelamos progresar en la vida. Tenemos esa dualidad de querer lo fácil, lo seguro y lo conocido, pero también deseamos algo más, algo diferente. Es parte de la naturaleza humana buscar un propósito o aspirar a más.
Al final, el cambio en nuestra vida se basa en aprender nuevas habilidades. Si cada mes nos comprometemos a aprender una nueva habilidad y nos damos el tiempo para hacer cosas diferentes, podremos añadir emoción a nuestra vida y conocer gente nueva. Si siempre nos movemos en el mismo trabajo, tomamos el mismo medio de transporte y recorremos el mismo camino, es comprensible que no experimentemos cosas nuevas.
La clave está en arriesgarnos a aprender cosas nuevas. Si nos atrevemos a tomar un curso distinto, asistir a una charla o comprar un libro nuevo, esa nueva adquisición de conocimientos nos brindará la oportunidad de conocer personas relacionadas con esas novedades y transformará nuestra vida. Por lo tanto, te invito a tomar más riesgos y embarcarte en la aventura de aprender.
¡Porque al aprender cosas nuevas, nos enfrentamos a desafíos que, inevitablemente, nos permiten conocer gente nueva y descubrir nuevos aspectos de la vida!